Las altas temperaturas del verano en Argentina hacen que el aire acondicionado sea un aliado indispensable para sobrellevar el calor. Sin embargo, para que el equipo funcione de manera eficiente y consuma menos energía, es clave realizar un mantenimiento periódico.
Los filtros están diseñados para capturar la suciedad y permitir el acceso de aire al sistema de refrigeración. Si no se encuentran limpios, pueden provocar sobrecalentamiento, goteo de agua o sobrecarga en el motor.
Cómo limpiar los filtros del aire acondicionado, paso a paso
Para garantizar una limpieza segura y efectiva, se recomienda seguir estos pasos:
Apagar y desenchufar el equipo: antes de comenzar cualquier tarea de mantenimiento, es fundamental asegurarse de que el aire acondicionado esté apagado y desconectado de la corriente eléctrica.
Ubicar los filtros de aire: en la mayoría de los modelos, se encuentran detrás de la rejilla frontal del equipo. Consultar el manual del fabricante si no se los encuentra fácilmente.
Retirar los filtros con cuidado: extraerlos con suavidad para evitar dañarlos. En la mayoría de los casos, basta con deslizar o levantar la pieza para retirarla.
Sacudir o aspirar el polvo acumulado: si los filtros no están muy sucios, se puede usar una aspiradora con accesorio de cepillo o simplemente sacudirlos para eliminar el polvo superficial.
Lavar los filtros con agua tibia y jabón neutro: si la suciedad está adherida, enjuagar los filtros con agua tibia y detergente suave. No usar productos químicos agresivos ni cepillos de cerdas duras, ya que pueden dañar el material.
Dejar secar completamente los filtros: una vez lavados, asegurarse de que los filtros estén completamente secos antes de volver a colocarlos. Se pueden dejar secar al aire libre o utilizar un secador de aire frío.
Volver a instalar los filtros y encender el equipo: una vez secos, colocar los filtros en su lugar, asegurándose de que estén bien ajustados. Luego, encender el aire acondicionado y verificar que funcione correctamente.

Cada cuánto recomiendan limpiar los filtros del aire acondicionado
La frecuencia de limpieza depende del uso del equipo y de las condiciones ambientales. Según expertos, se recomienda limpiar los filtros:
Al menos dos veces al año, antes y después del verano.
Cada vez que se cambia el modo de aire frío a calor, en los equipos que tienen función de calefacción.
Con mayor frecuencia si el aire acondicionado se usa diariamente o en zonas con mucho polvo, como áreas urbanas con humo o viviendas cercanas a rutas.
Qué pasa si no se limpian los filtros del aire acondicionado
No limpiar los filtros del aire acondicionado puede generar varios problemas, tanto en el funcionamiento del equipo como en la calidad del aire:
Pérdida de eficiencia energética: los filtros sucios obstruyen el paso del aire, lo que obliga al equipo a trabajar más y consumir mayor electricidad.
Reducción de la vida útil del equipo: el sobreesfuerzo del motor y el compresor puede provocar fallas prematuras.
Riesgo de recalentamiento y goteo de agua: el exceso de suciedad puede causar sobrecarga en el motor y condensación excesiva.
Acumulación de polvo y bacterias: los filtros sucios pueden liberar partículas contaminantes en el aire, afectando la salud respiratoria de quienes habitan el espacio.
Realizar una limpieza regular de los filtros es una tarea sencilla que se puede hacer en casa sin necesidad de llamar a un técnico. Además de evitar gastos en reparaciones, garantiza un ambiente más saludable y un aire acondicionado que funcione correctamente.