Por Luciana Rodriguez
El empleo formal en la construcción sigue en caída, acumulando diez meses consecutivos de descensos, y situándose en niveles históricos mínimos. Según el informe del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (IERIC), en junio de 2024 se registraron 348.777 trabajadores en el sector, lo que representa una caída mensual del 0,4%, ligeramente superior al 0,2% registrado el mes anterior.
El informe destaca que, aunque la caída muestra señales de desaceleración, la cifra es alarmante al compararse con el año anterior, reflejando una disminución interanual del 21,2%. Este descenso convierte a junio de 2024 en el segundo peor junio desde el inicio de la serie histórica en 2007, solo superado por el impacto de la pandemia en 2020.
El IERIC subraya que «la cantidad de puestos de trabajo registrados en junio se encuentra entre los registros más bajos de la serie histórica, superando apenas los meses críticos de 2020 y 2021, marcados por la crisis del Covid-19». Esta caída se agrava al considerar que el segundo trimestre de 2024 tuvo un nivel de ocupación menor al del primero, un comportamiento que contrasta con la estacionalidad habitual del sector.
La demanda de Cemento Portland, un indicador clave de la actividad en la construcción, también mostró una significativa contracción. En el segundo trimestre de 2024, la demanda cayó un 32% interanual, constituyéndose en la segunda mayor caída de la serie histórica desde 2004, solo superada por la correspondiente al segundo trimestre de 2020.
En cuanto a las remuneraciones, el salario promedio de los trabajadores registrados en la construcción alcanzó en junio los $1.067.732,4, una cifra que incluye el pago del medio aguinaldo. Aunque esta remuneración representa un aumento interanual del 246,7%, quedó por debajo de la inflación del 271,5% registrada en el mismo período, lo que implica una pérdida del poder adquisitivo en términos reales.
La situación del empleo en la construcción, reflejada en este informe, pone de manifiesto un sector en crisis, con profundas repercusiones tanto en el mercado laboral como en la economía en general.