Las entidades financieras prevén recurrir al mercado de capitales en 2025 para financiar el crecimiento de los créditos hipotecarios, ante la alta demanda registrada en los últimos meses. Los bancos evalúan la emisión de Obligaciones Negociables (ON) y acciones, como estrategia para fortalecer su capacidad prestable en un contexto económico con una inflación más moderada.
«El año que viene habrá emisiones de bonos de bancos e incluso de acciones para poder crecer en capital y seguir bancando el crédito», adelantó Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA). Esta estrategia busca aprovechar el entorno de desinflación y estabilidad cambiaria que ha impulsado el crecimiento de los créditos hipotecarios, especialmente en los últimos meses.
El presidente de ABA proyectó que esta tendencia continuará en 2025, un factor clave para el crecimiento de la economía y beneficioso tanto para familias como para empresas. Además, los bancos seguirán invirtiendo en tecnología, ciberseguridad e impulsando medios de pago electrónicos, con el objetivo de fortalecer su infraestructura para el manejo de los nuevos volúmenes de crédito.
El boom de los créditos hipotecarios
El crecimiento de los créditos hipotecarios fue una de las principales tendencias del sector bancario en 2024. Según el Banco Central, en octubre los créditos hipotecarios crecieron un 16,9% a precios constantes, impulsados por la desinflación y la calma cambiaria de los últimos meses. En septiembre de 2024, los bancos otorgaron 1.370 nuevos créditos hipotecarios UVA, un incremento del 78% respecto al mes anterior y del 188% respecto al promedio mensual de 2023, según datos de la Asociación de Bancos de la Argentina (ADEBA).
Este fuerte crecimiento se ha dado en un contexto de reordenamiento macroeconómico que ha generado expectativas a mediano y largo plazo. Asimismo, los bancos han podido consolidar su posición financiera, ya que han reducido su exposición al financiamiento del Tesoro y han sorteado obstáculos legislativos que podrían haber afectado las condiciones de los créditos hipotecarios.
El caso Azzimonti y sus efectos en el sistema bancario
A pesar del optimismo en el sector, la situación no está exenta de desafíos. El reciente fallo de la Corte Suprema favorable a Renzo Azzimonti, que incluye el cambio del sistema de ajuste por inflación a una tasa de interés real negativa, ha generado preocupación en el sistema bancario. Las principales asociaciones bancarias expresaron su malestar por la modificación de las condiciones del contrato UVA, advirtiendo que esta decisión podría generar inseguridad jurídica y minar la confianza en esta herramienta crediticia.
La resolución del caso, que será evaluada por la Corte Suprema, podría tener un impacto significativo en el futuro de los créditos hipotecarios, especialmente en aquellos ajustados por inflación, y en la capacidad de los bancos para seguir ofreciendo financiamiento en términos sostenibles.
El auge de las Obligaciones Negociables (ON) fue una de las respuestas del sector a la creciente demanda de crédito. Tras la implementación del blanqueo de capitales, que permitió a quienes regularicen más de u$s100.000 evitar pagar una alícuota del 5%, las ON se han convertido en una alternativa atractiva para los inversores, especialmente los más conservadores. Actualmente, los rendimientos de las ON se ubican entre el 7% y el 9%, lo que las convierte en una opción viable para aquellos que buscan estabilidad en un contexto económico incierto.
De cara a 2025, las emisiones de ON y bonos bancarios seguirán siendo una herramienta clave para los bancos, que buscan mantener una capacidad prestable adecuada para enfrentar la demanda de créditos hipotecarios y continuar con su proceso de expansión y fortalecimiento en un entorno de mayores perspectivas económicas.