El Gobierno Nacional anunció un cambio de rumbo en su política habitacional con la eliminación del plan Procrear, un programa que desde 2012 facilitaba el acceso a la vivienda mediante créditos estatales. Así lo confirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien además informó sobre la implementación de las «hipotecas divisibles» para proyectos inmobiliarios en desarrollo.
El plan Procrear, que dependía del Ministerio de Economía liderado por Luis Caputo y estaba gestionado por la Secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda, dejará de existir a partir de este martes. Actualmente, más de 17 mil obras se encuentran en curso bajo este esquema, cuya desaparición marcará un cambio significativo en la política de vivienda del país.
Para compensar la desaparición del Procrear, el Ejecutivo habilitará las hipotecas divisibles. Esta medida permitirá a los desarrolladores inmobiliarios dividir sus proyectos en unidades hipotecarias independientes, facilitando la financiación y comercialización de propiedades en etapas de construcción.

Ajustes en fondos fiduciarios
La eliminación del Procrear se enmarca en una serie de ajustes realizados desde la asunción de Javier Milei. El Gobierno llevó adelante una auditoría de los fondos fiduciarios, estructuras financieras que canalizan recursos estatales hacia proyectos específicos. Entre los fondos ya cerrados se encuentra el Fondo para el Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires, creado durante la gestión de Alberto Fernández.
Otro fondo que sufrió modificaciones fue el Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), que destinaba recursos para la urbanización de barrios populares. El Gobierno redujo significativamente su financiamiento: de recibir una tercera parte del 30% del Impuesto PAÍS, pasó a obtener apenas un 1%.
Estos movimientos responden a la política económica de Javier Milei, que busca reducir la intervención estatal en áreas clave como educación, salud, urbanización y ahora, vivienda. La eliminación del Procrear y la implementación de hipotecas divisibles son parte de este plan más amplio de reestructuración financiera, cuyo impacto en la sociedad será materia de análisis en los próximos meses.
La decisión genera expectativas e incertidumbre entre quienes estaban en proceso de acceder a una vivienda a través del plan Procrear, mientras que los desarrolladores inmobiliarios evalúan las oportunidades que podrían abrirse con la nueva modalidad de hipotecas divisibles.