Un informe privado anticipa un crecimiento sin precedentes en el mercado de créditos hipotecarios en Argentina, que podría alcanzar cifras históricas en los próximos meses. Factores como una mayor accesibilidad financiera y el interés de las familias en dejar de alquilar para convertirse en propietarias están impulsando esta tendencia, mientras las entidades financieras registran un notable incremento en consultas y solicitudes. Este período de expansión podría consolidarse como un punto de inflexión para el acceso a la vivienda propia, según proyecciones de especialistas.
Según las estimaciones, la cantidad de créditos hipotecarios otorgados podría triplicarse este año en comparación con 2024, llegando o incluso superando las 30.000 operaciones. Este crecimiento responde a la recuperación sostenida del sector bancario desde el año pasado. Durante octubre de 2024, último dato disponible, se registró un incremento del 4,7% en el saldo real de los préstamos totales, incluyendo aquellos ajustados por UVA (Unidad de Valor Adquisitivo), herramienta que se consolida como una de las más utilizadas por los solicitantes. Además, el sistema bancario sumó 2.300 nuevos deudores hipotecarios, un número significativamente superior al promedio mensual de los últimos cinco años.
La competencia entre bancos y la intención del Gobierno de reducir su papel como principal receptor de fondos son dos factores centrales que impulsan este crecimiento. La competencia de tasas y la implementación de medidas como la flexibilización en los estándares de aprobación para los créditos hipotecarios es clave en este auge.

El impacto de la inflación controlada se presenta como un pilar importante para el mercado hipotecario. En diciembre de 2024, la inflación alcanzó un 2,7% mensual, su nivel más bajo en varios años. Además, el Gobierno implementó un sistema de “crawling peg” del 1% mensual que comenzará a regir en febrero, lo que podría garantizar una mayor estabilidad para bancos y deudores.
Según el Banco Central, durante diciembre de 2024 se otorgaron créditos hipotecarios por un total de USD 240 millones. Sin embargo, a pesar del crecimiento del mercado, persisten desafíos importantes. Las tasas de interés continúan en niveles elevados y han aumentado entre 0,5 y 3 puntos porcentuales en los últimos meses, lo que impacta en la accesibilidad. Además, el aumento en la demanda llevó a los bancos a reducir los plazos de los créditos, que pasaron de 30 a 20 años en muchas entidades, y a disminuir el porcentaje de financiación disponible para los nuevos tomadores.
Otro desafío identificado es la falta de ajuste significativo en el valor del metro cuadrado, lo que podría limitar la capacidad crediticia de los solicitantes a largo plazo, especialmente si los precios de las propiedades continúan en alza.
Una de las características principales del mercado actual es la predilección por los préstamos indexados en UVA, dado que las tasas fijas ofrecidas por las entidades financieras se mantienen en niveles prohibitivos. Por ejemplo, el Banco Provincia ofrece tasas fijas superiores al 40% anual, lo que encarece considerablemente las cuotas iniciales.
En este contexto, los créditos UVA permiten cuotas más accesibles al estar vinculadas a la inflación, lo que los hace más manejables para los tomadores con ingresos actualizados. Sin embargo, algunos especialistas sugieren que sería más conveniente que los bancos apostaran por créditos en pesos con tasas fijas y razonables.
Por otro lado, la demanda de inmuebles sigue en alza, especialmente entre quienes buscan adquirir su primera vivienda. Según datos del sector, el 68% de las solicitudes se destinaron a la compra de primeras propiedades, mientras que un 18% correspondió a segundas viviendas. El plazo promedio seleccionado es de 20 años, con montos que oscilan entre $45.000.000 y $90.000.000.
El inicio de 2025 marca un momento de transformación para el acceso a la vivienda en Argentina, con un mercado hipotecario que se encamina a cifras récord. Miles de familias ven más cerca el sueño de la casa propia, gracias a la estabilización económica y las mejores condiciones crediticias.
Especialistas enfatizan que garantizar la estabilidad a largo plazo será clave para sostener este auge. Además, una regulación financiera sólida será necesaria para mantener la confianza en el sistema y evitar desequilibrios futuros. Con las entidades financieras avanzando hacia un récord en escrituras, los próximos meses serán cruciales para consolidar este crecimiento en el sector hipotecario argentino.